jueves, octubre 20, 2005

Ironic


A traffic jam when you're already late y quisiera escaparme de aquí, tomar la alternativa, rebasar cada carro, pasarme las luces rojas, transgredir cada señalamiento, cada aviso, pero no soy tan canalla. Aquí sigo, sentada, pensando en lo que estarán pensando en la oficina: a) es lunes, así ha de haber estado su fin de semana; b) a lo mejor tiene a la niña enferma; c) o tal vez su mamá esté enferma; d) se le descompuso el carro; e) a mí quedó de entregarme un reporte a primera hora de la mañana; f) yo le quería pedir permiso de salir temprano; g) pues igual aprovecho para quemar unos discos en su máquina. Pero todos están lejos de lo que realmente pasa conmigo.

Sucede que no quiero llegar a la oficina, por eso tomé las rutas con más tráfico, las más densas, para tampoco estar en casa si me llamas, aunque puedes llamarme al celular, pero ya lo apagué y ahora estoy sola entre cientos de carros que no caminan, que no se mueven, algunos bufan como si eso les sirviera de algo, otros como yo, han apagado el motor y se resignan, nos resignamos a pasar algunas horas en medio de este tráfico, en mitad de la calle, en el centro de una ciudad del centro de un estado al occidente de un país que se jacta de ser descentralizado. Si esto se prolonga demasiado tal vez nos podrían venir a rescatar en helicópteros, subirnos en esas canastillas y darnos un paseíto por encima del caos... jodidos los que se quedaron abajo del túnel.

¿Cuánto tiempo ha pasado ya?, la cancioncita sigue rondándome en el cerebro, it's like rain on your weadding day, it's a free ride when you're already pay a veces quisiera que ciertas canciones no me recordaran que la vida se puede burlar de una en el peor momento, como hoy, cuando el señor del carro de a lado se ha puesto a discutir con su esposa por la comida fría en su plato la noche anterior. La mujer realmente está cansada, lo puedo ver en su rostro, que le diga un poco más y estallará en llanto o se lanzará a golpes sobre él y entonces tal vez aprenda a quedarse calladito. En el carro de adelante una mujer va rizándose las pestañas y por el retrovisor puedo ver que la pareja de atrás ni siquiera se dirige la palabra. Y el maldito helicóptero que no llega.

¿Cuánto tiempo puede pasar para que el departamento de tránsito determine como emergencia vial un embotellamiento? Me han dicho que hay una ciudad más grande, en la que una puede estar en su automóvil hasta 3 horas y es una situación normal; la gente sale de sus casas con el café, el diario, la revista, el maquillaje, todo lo que no puede hacer en su casa tiene tiempo de sobra para realizarlo dentro de su auto mientras se dirige a su trabajo, a su escuela, a lo que resta del día por vivir.

tacatacatacatacataca... ese es un helicóptero, por fin, llegó nuestra salvación, los que estamos atrapados en el tráfico seremos liberados por el plan DN-3 de emergencia vial, if there's such a thing, en unas horas podré estar en mi trabajo, sentirme protegida, incluso podría presumir del vuelo en la canastilla, la aprehensión que sentí al subirme sobre ella y dar un vistazo por la ciudad... ¿hasta dónde se podría extender mi vista estando allá arriba? tacatacatacataca el helicóptero está justo sobre nuestras cabezas, el gorila del auto de junto ha sacado su cabeza por la ventanilla --qué ganas de que pasara una moto en este momento y le arrancara de una vez por todas ese cerebrito que sólo le sirve para atormentar a la mujer que está a su lado.

Isn't it ironic, don't you think El helicóptero se ha ido, todavía escucho, no sin cierto desencanto, el ruido de sus motores alejándose... es una pena. El tráfico ha comenzado a circular, lento, cansado, pero al menos ya van unas cinco o diez o cien vueltas de la llanta sin detenerse... es una pena, cuando me atreví a imaginarme en una situación extraordinaria, a sentirme casi Bárbara Blade sobre una canastilla de helicóptero, los automóviles han comenzado a moverse y yo vuelvo a sentirme estancada. A little too ironic...

1 comentario:

Anónimo dijo...

Como Autopistas al sur, de Cortazar pero al reves.
Hay un camino, esta atascado, y lo peor es que llegan a destino.